ETERNA MADRE
Estudia siempre, decías
Sacra verdad
Rama aleteando en todo tiempo
No lo entendí de infante
Descubría el mundo entre juegos.
Estudia, estudia, eres promesa llamada juventud
Amigos, amigas, fiestas… todo lo que debo saber
Es hora de poner ladrillo para mañana
Adusta, seria, ceremoniosa exclamaste,
Ajustaste la mano indicando el camino.
Universidad, mundo de ciencias que no uso
Teorías incompresibles
Postulados de cristal, roto en el muro de la vida
Cartón que infla el pecho;
Henchida de orgullo como nadie
Lloraste cual niña emocionada
Besaste mi frente: ¡gracias!
!Gracias! ¿gracias?, soy yo quien debe agradecer
NO, retoño, gracias porque mi semilla es útil
Ve, siembra donde vayas.
Jamás distingas entre arena, tierra y piedra
Eres sembrador: toda semilla de tus manos germinará.
En primavera, sé sereno, no experimentes el riego
Tu huerto podría dañarse;
En verano usa la sombra de la reflexión
Hay norte y sur; ayer, hoy y siempre un mañana
Noches aunque largas encuentran nuevo día;
En otoño, ten paciencia, las hojas suelen caerse
Mas recuerda, mañana brotarán nuevas;
Ya en invierno busca el abrigo del equilibrado saber
La experiencia es experiencia si se comparte
Prepárate para la marcha al infinito…
Rememoro tu voz que aún sopla delicadamente mi oído
Como recuerdo tus brazos que daban acero mi ser
Tus besos, delicados bálsamos que curaban todo temor
Tu mirada echo camino a la cima.
Aun tengo entre mi mano tus delgadas manos de uñas rosadas
Agrietándose de calendarios raídos
Caminar siempre raudo trocándose en cansino
Curvo como la esfera terrestre.
Un día dijiste con seriedad filosofal
Se mal hijo; pero nuca seas mal padre
Yo estoy en el ocaso, tus hijo son la aurora
Partiste a ese viaje sin retorno
Dejando la soledad instalada en casa
Que resiste a marcharse
Tal vez me acompañe cuando vaya a tu encuentro.
He dicho muchas veces que te amo, madre
Debieron ser más, infinitamente debí decirlas
He llorado tantas veces en tu pecho de miedo, dudas, dolores…
Debió ser mucho más, llorar en tu regazo de alegría, de emoción
Llorar simplemente por el deleite de sentir tu corazón latir,
Tus brazos cerrarse en mí
Debí llorar más, más en tu pecho Rosita.
Tengo miedo, mucho miedo de visitarte
No puedo ir a tu morada, enfrentarme a un frio rectángulo;
Saber que estás ahí y no poder abrazarte
Saber que estas ahí y no poder besarte
Saber que estas ahí y no poder descansar mi testa en tu pecho
Y llorar cual niño por el simple placer de sentir
Tu vivido corazón latiendo
Saber que estás ahí y no poder decir
Te amo mamita.